"La práctica frecuente de este deporte aumenta el rendimiento académico de los niños en matemáticas y en comprensión lectora"
María De La Huerta | A
Coruña
"El ajedrez es un excelente gimnasio mental que
ralentiza el envejecimiento cerebral e, incluso, podría retrasar la aparición
de enfermedades como el alzhéimer", asegura el periodista especializado
Leontxo García (foto), quien defiende que esa disciplina deportiva "debería ser
una materia obligatoria en todos los colegios" porque "aumenta el
rendimiento académico en matemáticas y comprensión lectora"
A Costa da Morte es, durante estos días, un océano de
ajedrez, ciencia y cultura. La primera edición del Torneo Internacional Entre
Faros, que se celebra en Fisterra, Camariñas y Muxía, reúne en la zona a cinco
grandes maestros mundiales del tablero: el cubano Lázaro Bruzón, el búlgaro
Iván Cheparinov, el húngaro Richard Rapport, el peruano Julio Granda y el
gallego Iván Salgado. Las partidas son retransmitidas a diario para todo el
mundo, a través de internet, por Leontxo García, periodista especializado en
esta disciplina con más de treinta años de experiencia en torneos
internacionales, quien valora la "peculiaridad" de este certamen, que
aúna la competición deportiva con la promoción cultural y social del ajedrez,
"la gran asignatura pendiente".
-¿Cómo valora el desarrollo de esta primera edición del
torneo en A Costa da Morte?
-Estoy encantado de participar en esta iniciativa, que
combina a la perfección la belleza de A Costa da Morte con la inteligencia del
ajedrez. En España se celebran muchos torneos, pero hay pocos que tengan una
personalidad propia, como éste. En el aspecto deportivo cuenta con
participantes de primer nivel y, en el cultural, busca promover el valor social
de esta disciplina, sobre todo entre los niños, algo sumamente importante...
-En una entrevista reciente aseguraba que el ajedrez debe
"reinventarse y mejorar en mercadotecnia" para lograr una mayor
difusión social. ¿No se ha vendido bien?
-No. El gran pecado de este deporte es, precisamente, la
falta de una buena comunicación. Se ha estado vendiendo mal, y esto ha creado
en la sociedad la sensación de que el mundillo del ajedrez es muy hermético.
-Usted, sin embargo, siempre ha defendido su utilidad
educativa y sanitaria. En su último libro, Ciencia y ajedrez, pasiones
mezcladas, vuelve a incidir sobre esta cuestión...
-No es que lo defienda yo, es que diversas investigaciones
científicas llevadas a cabo en los últimos 120 años demuestran que el ajedrez
es un excelente gimnasio mental que ralentiza el envejecimiento cerebral y que,
incluso, podría retrasar la aparición de enfermedades como el alzhéimer. Hay
indicios sólidos para afirmar, también, que la práctica frecuente de este
deporte desarrolla la capacidad intelectual de los niños y aumenta su
rendimiento académico en matemáticas y en comprensión lectora, justo las dos
grandes carencias de los alumnos españoles, según el Informe PISA.
-¿Cree, entonces, que el ajedrez se debería incluir como
asignatura obligatoria en los planes de estudio de los colegios?
-Sin duda. De hecho, la Eurocámara emitió el año pasado una
recomendación, respaldada por 415 europarlamentarios, la mayoría, para que así
se hiciera.
-Pero no se ha hecho...
-En la actualidad, un mínimo de 300 colegios españoles
imparten ya esta disciplina como materia obligatoria, y en alrededor de un
millar es optativa. Y si no se hace en más es por la escasez de profesores
especializados en esta materia.
-En su libro también habla de las nuevas tecnologías y de
sus aportaciones al mundo del ajedrez. ¿Cree que las computadoras terminarán
por sustituir a los jugadores de élite?
-En una entrevista que me concedió varios años -antes de que Garry Kasparov perdiera con la máquina Deep Blue-, Anatoly Karpov me dijo que no deberíamos tener miedo de que algún día el mejor ajedrecista del mundo fuese una máquina, porque el invento de la bicicleta no terminó con el atletismo, ni el de la moto con el ciclismo... Personalmente, creo que siempre habrá un ajedrez para personas y otro para máquinas, porque estas últimas están programadas para jugar partidas perfectas, y los mejores duelos siempre han partido de errores humanos.
Fonte:
La Opinion

Postar um comentário